Aprendiendo a tener contentamiento. Filipenses 4:11
Descansando en Dios - En podcast af Francisco Atencio

Kategorier:
338 – Fil 4:11 - Aprendiendo a tener contentamiento. No lo digo porque tenga escasez, pues he aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación. ¿Está contento con la circunstancia que enfrenta? El apóstol Pablo sabía estar contento, así estuviera en abundancia o padeciera necesidad. El secreto radicaba en el poder de Cristo para fortalecerlo (Fil 4:13). ¿Tiene usted muchas necesidades o está descontento porque no tiene lo que desea tener? Aprenda a apoyarse en las promesas de Dios y en el poder de Cristo que lo ayudará a contentarse a pesar de su situación. Si su deseo es tener siempre más, pida a Dios que trate ese deseo y que le enseñe a estar contento en cualquier situación. Él suplirá todas sus necesidades, pero de la manera que Él considere mejor para usted. ¿Cuál es esta verdad? Es la siguiente: Dios y lo que Dios me da, es todo lo que necesito. Dios promete en el Sal 84:11 Porque sol y escudo es Jehová Dios; Gracia y gloria dará Jehová. No quitará el bien a los que andan en integridad. 1. Dios es el proveedor. La Biblia enseña que el soberano Dios del universo nos ama y ha prometido darnos todo lo que realmente necesitamos. Él no ha prometido darnos todo lo que “nosotros queremos”, pero si prometió suplir nuestras necesidades. Moisés recuerda al pueblo de Israel como Dios lo sustentó durante 40 años en Dt 8:3-4 te afligió, y te hizo tener hambre, y te sustentó con maná, comida que no conocías tú, ni tus padres la habían conocido, para hacerte saber que no sólo de pan vivirá el hombre, mas de todo lo que sale de la boca de Jehová vivirá el hombre. Tu vestido nunca se envejeció sobre ti, ni el pie se te ha hinchado en estos cuarenta años. El Apóstol Pablo dijo: “Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús”. (Fil 4:19) 2. Dios suple nuestras necesidades materiales. El Señor Jesús nos dice que no estemos ansiosos por nuestras necesidades materiales, como comida, ropa y otras necesidades de la vida. Jesús dijo: “No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir... vuestro Padre Celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas. Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas” (Mt 6:25-34). El apóstol Pablo enseña: “Pero gran ganancia es la piedad acompañada de contentamiento; porque nada hemos traído a este mundo, y sin duda nada podremos sacar. Así que, teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto.” (1Ti 6:6-8). 3. Dios suple nuestras necesidades emocionales. El nos ha hecho miembros del cuerpo de Cristo, y todo miembro del cuerpo de Cristo es importante. Dios promete en Is 26:3-4 Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado. Confiad en Jehová perpetuamente, porque en Jehová el Señor está la fortaleza de los siglos. El nos ha “aceptado en el Amado”. Dios ama sus hijos y nos promete: “Con amor eterno te he amado....” (Jer 31:3) 4. Dios suple nuestras necesidades espirituales. En Cristo, Dios nos ha dado todo lo que necesitamos para la vida espiritual. Enseña 1Co 1:30 Mas por Él [Dios] estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría, justificación, santificación y redención. La Biblia enseña: “Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda be ndición espiritual en los lugares celestiales en Cristo” (Ef 1:3). 5. Dios nos da libremente todas las cosas. Al darnos a Su Hijo, nos ha dado el regalo más grande de todos. Por lo tanto podemos estar seguros de que Él nos dará también cualquier otra cosa que podamos necesitar. La Biblia dice: “El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con Él todas las cosas?” (Ro 8:32) 6. El secreto para estar contento. El apóstol Pablo no tuvo una vida fácil. Sufrió muchas persecuciones.