La humanidad de Jesucristo - Lucas 2:52
Descansando en Dios - En podcast af Francisco Atencio

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230 - Lc 2:52 - la humanidad de Jesucristo. Y Jesús crecía en sabiduría y en estatura, y en gracia para con Dios y los hombres. La doctrina de la humanidad de Cristo es tan importante como la doctrina de su divinidad. Jesús tenía que ser hombre si iba a representar a la humanidad caída. El apostol Juan escribe primera de Juan para disipar el error doctrinal que niega la verdadera humanidad de Cristo enseña en 1Jn 4:2 En esto conoced el Espíritu de Dios: Todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne, es de Dios. Si Jesús no era un hombre real, la muerte en la cruz fue una ilusión; tenía que ser real para morir por la humanidad. Las Escrituras enseñan la humanidad verdadera de Jesús. No obstante, también muestran que no poseía el pecado del hombre, la naturaleza caída como enseña 1Jn 3:5 Y sabéis que Él [Cristo] apareció para quitar nuestros pecados, y no hay pecado en él. 1. Nació de una virgen. El nacimiento virginal es una doctrina esencial y bíblica, necesaria para que Cristo no tuviera pecado. Si hubiera nacido de José, habría poseído naturaleza pecaminosa. Enseña Mt 1:18-20 El nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo. José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente. Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es. Mateo confirma el cumplimiento de la profesia de Is 7:14 en Mt 1:22-23 Todo esto aconteció para que se cumpliese lo dicho por el Señor por medio del profeta, cuando dijo: He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros. Tuvo un desarrollo normal. Lucas describe el desarrollo de Jesús en cuatro áreas: mental, física, espiritual y social. Fue hallado en el templo, sentado en medio de los doctores de la ley, oyéndoles y preguntándoles (Lc 2:49). Y Jesús crecía en sabiduría y en estatura, y en gracia para con Dios y los hombres. (Lc 2:52) 2. Tuvo un cuerpo verdadero de carne y sangre. El cuerpo de Jesús “era como el cuerpo de los otros hombres pero sin pecado” por ser engendrado por el Espiritu Santo. Al describirse en Lucas 1-2 el embarazo de María y su alumbramiento del niño Jesús, se afirma al verdadero Salvador de la humanidad. Se le reconoció como judío en Jn 4:9 La mujer samaritana le dijo: ¿Cómo tú, siendo judío, me pides a mí de beber, que soy mujer samaritana? Porque judíos y samaritanos no se tratan entre sí. Como el carpintero que tenía hermanos y hermanas en Mt 13:55-56 ¿No es éste el hijo del carpintero? ¿No se llama su madre María, y sus hermanos, Jacobo, José, Simón y Judas? ¿No están todas sus hermanas con nosotros? ¿De dónde, pues, tiene éste todas estas cosas? Experimentó el dolor de los azotes en Jn 19:1 Así que, entonces tomó Pilato a Jesús, y le azotó. El horror de la crucifixión en Jn 19:18 y allí le crucificaron, y con Él a otros dos, uno a cada lado, y Jesús en medio. En la cruz tuvo sed como un hombre en Jn 19:28. Su cuerpo contenía sangre y agua según Jn 19:33-34 Mas cuando llegaron a Jesús, como le vieron ya muerto, no le quebraron las piernas. Pero uno de los soldados le abrió el costado con una lanza, y al instante salió sangre y agua. 3. Tenía alma y espíritu humanos. Jesús fue un ser humano completo; tenía cuerpo, alma y espíritu. Estuvo angustiado en su alma al anunciar su muerte (Jn 12:27). Tenía conciencia de que iba a cargar con los pecados del mundo (Mt 20:28; 26:28). Se conmovió por la proximidad de ser crucificado en Jn 13:21 Habiendo dicho Jesús esto, se conmovió en espíritu, y declaró y dijo: De cierto, de cierto os digo, que uno de vosotros me va a entregar. Finalmente entregó su espíritu cuando murió y dijo en Jn 19:30 Consumado es. 4. Tenía características de un ser humano. Jesús tuvo hambre