Ministerio presente de Jesucristo - Juan 15:5
Descansando en Dios - En podcast af Francisco Atencio

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233 - Jn 15:5 - Ministerio presente de Jesucristo Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. Jesucristo continúa con su ministerio en el presente y futuro. Veamos algunas de sus obras. 1. Cristo está edificando su iglesia. Formación del cuerpo. 1Co 12:13 Porque por un solo Espíritu fuimos todos bautizados en un cuerpo, sean judíos o griegos, sean esclavos o libres; y a todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu. Enseña que el Espíritu Santo está formando a la iglesia, el cuerpo de Cristo; no obstante, Cristo, como cabeza de la iglesia la guía y la controla. En Hch 2:47… el Señor añadía cada día a la iglesia los que habían de ser salvos. Enseña que Cristo es el que produce el crecimiento de la iglesia. Tal cosa es consistente con Hch 1:1-2, donde Lucas indica que el Evangelio por él escrito describe la obra que Jesús comenzó, lo cual sugiere que Él, en unidad con el Padre y el Espíritu Santo continúa la edificación de la iglesia como enseña Hch 9:31 Entonces las iglesias tenían paz por toda Judea, Galilea y Samaria; y eran edificadas, andando en el temor del Señor, y se acrecentaban fortalecidas por el Espíritu Santo. Dirección del cuerpo. Cristo no es sólo la cabeza del cuerpo, sino que también lo dirige según Col 1:18a y Él [Cristo] es la cabeza del cuerpo que es la iglesia. Le da dirección y gobierna soberanamente según Ef 5:23 porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo, y Él es su Salvador. Igual que la cabeza humana le da dirección a todo el cuerpo físico, así Cristo, como cabeza de la iglesia, la dirige a través de la Palabra de Dios (Ef 5:26). Alimentación del cuerpo. Cristo sustenta a la iglesia, tal como un individuo alimenta su cuerpo humano; Él es el medio para alimentarla hasta alcanzar la madurez. La obra presente de Cristo es llevar el cuerpo hacia la madurez como enseña Ef 4:13 hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo. Purificación del cuerpo. Cristo participa en la purificación del cuerpo. Produce la santificación del creyente (Ef 5:25-27). Ello denota la santificación progresiva con la cual Cristo purifica a la iglesia. Entrega de dones al cuerpo. Cristo es la fuente de los dones espirituales; el Espíritu Santo los administra como enseña 1Co 12:5 Y hay diversidad de ministerios, pero el Señor es el mismo. Ef 4:8 Por lo cual dice: Subiendo a lo alto, llevó cautiva la cautividad, Y dio dones a los hombres.Los dones se entregan con el propósito de edificar a toda la iglesia y así llevarla hacia la madurez, crecimiento espiritual según Ef 4:11-13. 2. Cristo está orando por los creyentes. La intercesión de Cristo asegura nuestra salvación. El creyente sólo podría perder su salvación si Cristo no fuera efectivo en su rol de mediador (Ro 8:34; He 7:25). La intercesión de Cristo involucra (1) su presencia ante el Padre (He 4.16; 10:22); (2) su palabra hablada (Lc 22:32; Jn 17:6-26); 3) su intercesión continua. La intercesión de Cristo restaura la comunión que se rompió con el pecado. A Cristo se le llama “Abogado” de los creyentes (parakletos), cuyo significado es “abogado defensor” en 1Jn 2:1 Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo. “En la literatura rabínica la palabra podría indicar a aquel que ofrece ayuda legal o quien intercede a favor de alguien más…Indudablemente, la palabra significaba “abogado” o “abogado defensor” en un contexto legal”. 3. Cristo nos está preparando un domicilio celestial. Cristo, en la gloria, está preparando en la Jerusalen celestial, nuestro hogar eterno como promete en Jn 14:2 En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. 4. Cristo