6. Ser o no ser fotógrafo profesional
El café del fotógrafo - En podcast af José Barceló
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https://youtu.be/1v5qjRwnseo En este episodio hablaremos de las cuestiones a preguntarnos al plantearnos si queremos ser fotógrafo profesional. Empezamos una semana más de podcast. Es Lunes, 9 de diciembre y como es algo sobre lo que me preguntan habitualmente los alumnos, me gustaría establecer los lunes para hablar sobre el mundo de la fotografía profesional y de trabajar como fotógrafo. Me gustaría que me comentárais qué os parece la idea, qué temas os gustaría que tratásemos en esta sección, etc. Ya sabéis que me encantaría que este fuese un podcast útil y práctico para todos vosotros. Podéis hacerme llegar vuestros comentarios a través del formulario de contacto que encontraréis en josebarcelo.com/contacto Bueno, ahora que ya os he comentado el tema de los lunes, vamos a empezar por el primer paso que da cualquier fotógrafo antes de convertirse en profesional. Plantearse la cuestión. Ser o no ser fotógrafo profesional. Cómo os decía antes, veo muy a menudo cómo algunos de mis alumnos de Mallorca Fotográfica hacen un curso de iniciación, después un nivel intermedio, se van enganchando a la fotografía, siguen con un curso avanzado, hacen algunos talleres sobre los temas que les gustan, se presentan a algún concurso y quedan primeros, les piden alguna sesión de fotos los amigos, y…. chachán! Llega ese momento, un pensamiento acecha, podría dedicarme profesionalmente a la fotografía. ¿Podría dedicarme profesionalmente a la fotografía? Aquí entran muchos factores en juego. La situación laboral, la familiar, la autoestima, la valentía o incluso a veces la inconsciencia de cada uno van a condicionar mucho la decisión final. La cuestión primera es ¿Por qué quieres dedicarte profesionalmente a la fotografía? Algunos de los que me estéis escuchando, conoceréis ya mi historia acerca de cómo he llegado hasta aquí. Para los que no, os hago un resumen. Al acabar el bachiller, decidí o bueno, me vi un poco obligado a irme a León, al norte de España. Para qué, para estudiar veterinaria, la carrera que siempre había querido hacer, a lo que siempre había querido dedicarme desde niño. Durante mis estudios llegó a mis manos mi primera cámara réflex, una Canon 350D, una réflex de gama baja muchísimo mejor que cualquier réflex de gama baja actual, que de cada vez las hacen peores, pero bueno, ya hablaremos otro día de este tema. La cuestión, descubrí la fotografía y me enganché. No estudié todavía nada sobre fotografía, ni gané ningún concurso, nunca he sido mucho de concursos, pero sí empecé a mandar las fotos a algunas agencias de fotografía y bueno, se iban vendiendo. Cuando me quedaban unas pocas asignaturas para acabar veterinaria, volví a Mallorca y, mientras estudiaba esos exámenes, empecé un curso de fotografía profesional, pero seguía sin ninguna intención de ser fotógrafo, simplemente quería aprender más sobre lo que me estaba apasionando. Al fin acabé veterinaria al año siguiente, y digo al fin porque más que un logro fue un peso que me quité de encima. El problema surgió cuando me di cuenta de que lo que me venía a la mente cuando pensaba en la clínica veterinaria eran cuatro paredes y un montón de horas entre ellas, eso sin contar las urgencias en días festivos. Me puse a preparar oposiciones, para aprovechar el título más que nada. Me pilló en pleno comienzo de crisis económica y sin expectativas de exámenes a la vista. Mientras estudiaba,